Autoría: Dra. Andrea Robles Parada

ALBINA BUSTOS fue una maestra normalista dedicada a la enseñanza técnica. Cursó sus estudios en la Escuela Normal No. 1 de Santiago, una vez titulada comenzó a desempeñarse como profesora en la Escuela Profesional Superior de Santiago. También se desempeñó como profesora en el Liceo de Niñas No. 2 de Santiago, para esta labor fue convocada en 1902 por Teresa Adametz, ex directora de la Escuela Normal y directora de ese Liceo desde 1896. En este establecimiento se desempeñó como profesora de preparatoria y de gimnasia. 

Sin embargo, su trayectoria docente está estrechamente ligada a la Escuela Profesional Superior de Santiago. Este establecimiento fundado en 1888 buscaba “procurar a la mujer una educación profesional propia de su sexo”, el que incluía cursos de lencería, bordado artístico, modas, sastrería, corsetería, comercio, cocina, entre otros. Entre 1900 y 1930 se crearon treinta escuelas profesionales para niñas a lo largo del país patrocinadas por la Sociedad de Fomento Fabril y supervisadas por el Ministerio de Industrias y Obras Públicas. Este desarrollo de la enseñanza técnica precisó de una especialización docente, de ahí que en 1906 la Escuela Profesional Superior iniciara el Curso Normal Profesional destinado a la preparación de maestras para desempeñarse en las escuelas profesionales. Este Curso, en que Albina Bustos participó dictando el ramo de pedagogía y didáctica, atendía la preparación de la futura normalista en las materias de castellano, aritmética, educación cívica, química, economía doméstica, dibujo, entre otros.

En 1912 fue nombrada directora de la Escuela Profesional Superior, tras la partida de Elicenda Parga de Thauby, quien dejó el puesto al ser nombrada Visitadora de Escuelas Profesionales. Anteriormente, entre 1907 y 1912, se desempeñó como subdirectora de este establecimiento. Una de las problemáticas que enfrentó como directora fue la discusión sobre el rumbo que debía tomar la formación técnica frente al desarrollo de una manufactura a gran escala que demandaba mano de obra calificada. Albina Bustos defendió la continuación de una la formación integral de las estudiantes –cursos elementales y manuales–, en oposición a la propuesta de una práctica productiva más cercana al utilitarismo que planteaba el empresariado industrial.

Colaboró con varios artículos y conferencias en la Revista Industrial Femenina, publicación creada en 1912 por sus alumnas del Curso Normal y dirigida por Dolores Labora. Aunque la revista estaba “dedicada a las dueñas de casa y a las industrias femeninas”, las colaboraciones de esta directora estaban dirigidas a sus estudiantes y la futura labor que desempeñarían como maestras. En 1927 participó de las actividades conmemorativas del cincuentenario del decreto Amunátegui –también llamado Tarragó-Le Brun–. Presidió la sección de Educación Profesional encargada de organizar el pabellón de esta rama de la enseñanza de mujeres en la Exposición de las Actividades Femeninas realizada en la Quinta Normal (Santiago). Además, participó en el libro colectivo Actividades femeninas en Chile –publicado en el marco de las celebraciones del cincuentenario– con una reseña monográfica sobre las escuelas profesionales de niñas. 

Además, hay que mencionar que fue secretaria del Club Social de Profesora en 1927. Este espacio fue fundado en 1924 por las maestras Sara Guérin de Elgueta, Ida Corbat, Ercilia Pérez, entre otras; y organizaba veladas literarias, conferencias y contaba con una biblioteca pedagógica. 

FRAGMENTO DE  “Sobre educación – La maestra (Para mis alumnas del Curso Normal)”

“¿Qué es el empleo de maestras? Cada una de vosotras, futuras maestras, me contestaréis en el acto como soléis hacerlo: «Este es un empleo moral que exige una vocación especial». Me agregaréis después que la maestra que olvide estos ideales sublimes y solo trabaje por percibir mensualmente un miserable sueldo, no merece el nombre de tal, porque no es sino una simple jornalera.
Bien, mis queridas niñas, habéis aprendido a apreciar la noble misión que vais a desempeñar, pero, y en la práctica, cuando ya seáis maestras ¿os acordaréis de la sublimidad de vuestra misión? ¿No trabajaréis también como la jornalera que solo aspira terminar la obra para percibir el salario?
No, recordad siempre que es el alma de vuestras alumnas la que tenéis que manejar, más aún que sus manos para adiestrarlas a librar la difícil batalla de la vida; que debéis guiar sus juveniles corazones por la senda recta y segura de la virtud; que debéis infundirles valor para resistir a las vicisitudes de la vida, para navegar con calma en la mar borrascosa del mundo, donde tantos escollos encuentra la mujer, y que. con vuestro ejemplo, tenéis que ser el verdadero y acabado modelo de la joven culta y laboriosa que puede bastarse a sí misma y contribuir al bienestar de cuantos la rodean.”

PUBLICACIONES DE ALBINA BUSTOS

  • Albina Bustos. “Sobre educación – La maestra (Para mis alumnas del Curso Normal)”, Revista Industrial Femenina, no. 2, diciembre 1912, s.p.
  • Albina Bustos. “Para mis ex-alumnas del Curso Normal”, Revista Industrial Femenina, no. 6, junio 1913, s.p.
  • “En la Escuela Profesional de Niñas”, La Silueta Magazine, no. 9, septiembre 1917.
  • Albina Bustos. “Escuelas Profesionales de Niñas”, Actividades Femeninas en Chile, Imprenta y Litografía La Ilustración, 1928, pp. 281-304.

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